La multinacional estadounidense Pfizer ha anunciado el cierre de un acuerdo para la compra de la farmacéutica Anacor Pharmaceuticals, dedicada a la fabricación de cremas, en una operación valorada en unos 5.200 millones de dólares, lo que se traduce en 4.600 millones de euros.
Pfizer pagará unos 88 euros en efectivo por cada acción de Anacor, lo que supone una prima del 55% respecto al cierre de sus títulos el pasado viernes, según ha explicado la compañía en un comunicado.
Esta operación se produce meses después del fracaso de la fusión con su rival Allergan, fabricante de Botox, que Pfizer compró por 150.000 millones de dólares. Esto permitió al gigante farmacéutico trasladar su sede a Irlanda y así ahorrar impuestos. El plan no tuvo éxito por la oposición que recibió por parte del gobierno estadounidense.
“La adquisición de Anacor representa una oportunidad muy atractiva para resolver una necesidad médica no atendida para un importante grupo de pacientes con dermatitis», ha asegurado Alberto Bourla, presidente de Pfizer Pharma.
Tras la compra, el gigante farmacéutico tendrá acceso a uno de los medicamentos estrella contra la dematitis atópica, el crisaborole, que está actualmente bajo revisión de la agencia estadounidense del mercado (FDA), cuya enfermedad afecta a entre 18 y 25 millones de personas en el país.
Pfizer suspende las inyecciones letales
Esta noticia ha sucedido días después de que Pfizer anunciara restricciones en la venta de algunos de sus productos para evitar su uso en inyecciones letales a presos condenados a muerte en Estados Unidos.
“Estamos restringiendo la distribución de determinados productos que han formado parte de los protocolos de ejecución de determinados estados. Pfizer se opone firmemente al uso de estos productos en inyecciones letales”, comentaba la compañía en un comunicado.
Algunos de los productos son el propofol, el bromuro de pancuronio y el cloruro de potasio, los cuales ahora se distribuirán de forma restringida a un grupo selecto de mayoristas bajo la condición de que no se vendan para inyecciones letales.