La Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria (SEFAC) ha realizado un estudio cuyas conclusiones establecen que las farmacias comunitarias son lugares idóneos a la hora de detectar hipertensión arterial en aquellas personas que no suelen frecuentar los centros de salud.
El estudio se realizó en el marco de la campaña mundial May Measurement Month (MMM), la cual fue creada por la Sociedad Internacional de Hipertensión durante el mes de mayo de 2018. SEFAC participó recopilando datos recabados por farmacéuticos comunitarios españoles, concretamente, de 891 profesionales que realizaron hasta 5.785 mediciones de presión arterial. Tal como explica la vicepresidenta de esta sociedad nacional, la doctora Ana Molinero, “el objetivo de esta campaña anual es aumentar el grado de conciencia con respecto a la presión arterial a nivel mundial, poniendo el foco especialmente en aquellas personas mayores de 18 años que habitualmente no se miden la presión arterial o no recuerdan cuándo fue la última vez que lo hicieron”. Entre los usuarios participantes en la campaña, el 64 por ciento fueron mujeres.
La hipertensión arterial se presenta como la enfermedad individual con más mortalidad del mundo. Todos los años mueren acerca de 10 millones de persona a causa de ella, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Una de las explicaciones a ello es que no presenta síntomas, por lo que no se detecta en todas las personas que la padecen.
El farmacéutico comunitario es un profesional cercano al paciente, por lo que es muy sencillo que sea este el que detecte la patología. Según Ana Molinero, “las determinaciones de la presión arterial protocolizadas realizadas por un profesional sanitario como el farmacéutico comunitario permite identificar un número significativo de personas con la presión arterial elevada y no tratada que pueden ser derivadas al médico de Atención Primaria para que pueda diagnosticar si se trata realmente de personas hipertensas o no”.