España es un referente mundial en tratamiento medioambiental de envases de medicamentos, con un aumento del 12,5 % en 2018 del material depositado por el ciudadano en puntos específicos para ello en farmacias y un sistema puntero que está sirviendo de ejemplo a otros países en el mundo.
Los llamados puntos Sigre están presentes en casi la totalidad de las farmacias españolas como lugar de recogida de los envases de medicamentos -se excluye material sanitario, dígase agujas, radiografías, gasas, termómetros. Su objetivo es ayudar a concienciar de la necesidad de no arrojar los envases vacíos o los restos de medicamentos caducados o que ya no se necesitan a la basura o por el desagüe de casa.
Además, mejora anualmente la calidad del material depositado en los puntos Sigre, con un mayor número de envases vacíos cuya cifra por primera vez en 2018 superó ligeramente el 20 por ciento del total de envases depositados. Aunque el envase esté vacío, este debe llevarse también a los puntos Sigre, porque contiene restos químicos que tienen que ser destruidos en beneficio del medio ambiente y la salud de la población.
Los medicamentos inservibles no se deben tirar por los desagües ni a la basura sino que tienen que depositarse en los puntos Sigre de las farmacias, como se especifica en los prospectos de todos los medicamentos autorizados en España. El problema de verter jarabes u otros medicamentos en el inodoro o fregadero es que podrían llegar partículas a los ríos o mares en el caso de pasar por sistemas de depuración obsoletos o poco eficientes. En el caso de las pastillas que se arrojan con otros residuos -y no en los puntos Sigre en las farmacias custodiados por un profesional sanitario- es que en ese caso sus compuestos podrían llegar a mezclarse con la tierra o ser arrastrados por las lluvias y esparcirse por el terreno.
Además, no solo España es referente en el tratamiento medioambiental por parte de los ciudadanos, sino que destacan los avances en innovación alcanzados por la industria farmacéutica en los últimos años, que ha conseguido reducir un 23 % el peso medio de los envases farmacéuticos comercializados en nuestro país. Se ha logrado que uno de cada cuatro envases de venta en farmacias incorpore alguna medida de ecodiseño: reducción de márgenes del cartón de la caja, aproximación de los alveolos de los blisters que contienen las cápsulas, utilización de materiales más ecológicos.