El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF) firmaron el pasado mes de abril un convenio de colaboración para potenciar el papel de las más de 22.000 farmacias españolas en la lucha contra la violencia de género. El objetivo es convertirlas en puntos de información, sensibilización y detección de casos.
Entre las acciones previstas, destaca la elaboración y difusión de un Protocolo de Actuación para el personal farmacéutico, con el fin de que puedan detectar rápidamente las primeras señales de la violencia de género y cómo actuar ante un posible caso. Además, se distribuirá material de apoyo para las farmacias.
En la presentación de este convenio, la ministra de Sanidad, Dolors Montserrat, ha animado a la red de farmacias a “convertirse en agentes activos” contra esta “lacra” que tiene la sociedad en la violencia de género. Montserrat ha destacado la labor que pueden desempeñar estos establecimientos sanitarios “dado que no solo hacen atención sanitaria sino social y conocen el entorno familiar de sus pacientes”.
Por su parte, Jesús Aguilar, presidente del CGCOF, ha explicado que «el abordaje de la violencia de género –ha dicho– requiere de un enfoque multidisciplinar e integral y este convenio recoge el compromiso de la Profesión Farmacéutica de participar y colaborar en la erradicación de esta lacra de la sociedad, que supone cualquier acto de violencia de violencia contra la mujer».
Esta iniciativa pone especial énfasis en el ámbito rural -en el que se ubican el 64 por ciento de las farmacias- ya que según los datos recogidos en la Estrategia Nacional para la Erradicación de la Violencia de la Mujer 2013-2016, el lugar de residencia, y en concreto el ámbito rural, puede tener un efecto condicionante a la hora de manifestar y reconocer la existencia de este problema.