En colaboración con el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, el Colegio de Farmacéuticos de Ciudad Real ha presentado esta semana el «Programa de cribado de cáncer de cuello de útero y colón» mediante una charla formativa a la que acudieron alrededor de 150 profesionales de la provincia.
Francisco Izquierdo, el presidente del COF de Ciudad Real, fue el encargado de inaugurar la jornada presentando a los responsables del Servicio de Salud que impartieron la formación y presentando el programa como una colaboración entre el COF y la administración regional con el objetivo de informar y ofrecer educación sanitaria de calidad a la población.
El jefe de Atención Primaria del Sescam, Alfonso Abaigar, explicó que se trata de una colaboración conjunta con el objeto de difundir información a los usuarios que acuden a las oficinas de farmacia, ya que los farmacéuticos son agentes de salud muy importantes para la mejora de la respuesta a la iniciativa del Sescam.
Asimismo, Abaigar informó acerca del programa preventivo de cáncer de colón, ya que se trata de un programa nuevo que genera recursos nuevos, y del cambio de organización en el programa preventivo de cáncer de cérvix.
Por su parte, la doctora María Luisa Torijano, médico de familia, preventista y coordinadora de Programas de Cribado de la Dirección General de Asistencia Sanitaria del Sescam, elogió la labor que llevan a cabo los farmacéuticos comunitarios y subrayó la importancia que puede tener este colectivo dentro del Programa al tener un contacto diario directo con la población objetivo. Torijano, informó de la futura distribución de folletos y material informativo a las farmacias.
Mediante los cribados, se mejora el pronóstico y la supervivencia. Sin cribados, la supervivencia oscila entre el 50 y el 60%, alcanzando el 90% en caso de que sí se realicen.
En la provincia de Ciudad Real, la población objetivo en el caso de la prevención de cáncer de colón es de 411.132 habitantes, el 29% de la población. Va dirigido a personas de ambos sexos de 50 a 69 años. En el caso del programa de cribado del cáncer de cérvix, va dirigido a una población de 540.000 mujeres de entre 25 y 64 años.